Otras novedades son la ampliación de incentivos a la
financiación a empresas y emprendedores culturales, la extensión de los fondos
reintegrables a préstamos destinados a mejora de los Bienes de Interés
Cultural, la regulación de los fondos patrimoniales indisponibles como vía de
financiación, la cesión de uso de espacios culturales públicos como medida de
incentivo a empresas y particulares, o la creación de un registro público de
actuaciones y bienes prioritarios de acciones de mecenazgo y de un registro de
mecenas.
Alonso ha admitido que "de la Ley de Patrocinio y
Mecenazgo se ha hablado mucho, se ha pensado menos y se ha trabajo y
comprometido poco por parte de los poderes públicos", y ha añadido que
"el modelo de dependencia exclusiva de la cultura de los presupuestos
públicos está agotado y es preciso un nuevo marco jurídico que favorezca una
estrategia conjunta público-privada con equilibrio entre ambos ámbitos, que
deben ser complementarios". Leer más >>